31 octubre 2014

Encuentro de tres culturas

 Por raro que parezca la cultura cubana actual en su afán revisionista debe aportar nuevas luces a aquel encuentro de los dos mundos en 1492.

¿Fue Puerto Padre o Bariay el punto por donde llegó Colón?

Este asunto constituyó centro del Coloquio Encuentro de tres culturas que reunió los días 27 y 28 de octubre en la sede villazulina de la UNEAC a figuras medulares de la historiografía cubana de la talla del Doctor Joel Cordoví, vicepresidente del Instituto de Historia de Cuba Jesús Ignacio Suárez, miembro de la comisión de expertos de esa entidad, Arturo Alexander Pedroso Alés, perteneciente a la Oficina del Historiador de La Ciudad de La Habana, Yanet Reinaldo profesora de la Universidad de Oriente junto a seis doctores en áreas de la pedagogía y de las ciencias, que conformaron un nutrido grupo de especialistas en temas socioculturales.
 Cuadro de Nereyda Rodriguez a Ramón Garrido

La exposición de las principales piezas del coleccionismo arqueológico a partir de los sitios existentes en el territorio, tuvo como valor adicional en la entrada del cónclave un retrato del investigador fallecido Ramón Garrido Padilla que realizó la creadora Nereida González. El espacio resultó propicio para honrar a uno de los que más aportó al conocimiento de la arqueología de La provincia de Las Tunas, provincia irrelevante hasta hace una década en la historia precolombina. Ramón fue parte de la expedición Del Amazonas al Caribe al mando del Doctor Antonio Núñez Jiménez. Con su temprana muerte dejó la mayoría de sus investigaciones inéditas, centradas en el estudio de murciélagos, mariposas y otras cuestiones de vital importancia relacionadas también con la lengua Aruaca, además de su gestión como presidente del Grupo Espeleo-arqueológico Atabex-Maniabón, conservador y taxidermista del Museo Polivalente Fernando García Grave de Peralta.

La muestra incluyó numerosas hachas petaloides, cuentas, majadores, gladiolitos. Entre las piezas más interesantes se mostraron al público el idolillo de apenas 9 milímetros de alto y un pendiente de oro encontrado en Loma del Aite, en la zona de la Pedrera en Delicias. Uno de los elementos más notables y que apoya el asentamiento de aborígenes en esta zona es la canoa aborigen monolítica de más de seis metros de largo que apareció debido al movimiento de las aguas en la zona de Cascarero en el 2008 luego del paso del ciclón Ike.

 En el primer bloque del encuentro teórico se abordaron asuntos relacionados con el puerto primado de Cuba en el que Reymundo Betancourt Alvero dio muestras, mediante un documental, de su voluminosa investigación y avances en cuanto a etapas importantes del estudio que aboga por su hipótesis de de que fuera Puerto Padre y no Bariay la primera tierra que pisó Colón.

Por su parte Arnaldo Rueda Quintana, principal investigador del libro que publicó la editorial Sanlope Portus Patris 1492-1992 en el quinto centenario, ofreció elementos de los principales puntos en los que basa su hipótesis de la entrada de Colón por la zona del Socucho a partir del diario del navegante, sus observaciones y los estudios actuales de la geografía y arqueología en comparación con Bariay.

Reymundo Betancourt en su exposisción
Estos dos investigadores deben unirse a pesar de sus discrepancias científicas a fin de conformar un equipo multidisciplinario que unirá fuerzas y dedicación en uno de los temas más apasionantes de la historia de América y más difícil de remover a partir de los atractivos turísticos que hace la región holguinera del suceso y de la aceptación tácita de Bariay, aun cuando la descripción colombina no coincide con muchos de sus elementos geográficos ni se ha establecido un careo que revise el tema en cuestión.


Además de estos asuntos se expusieron otros temas en torno a la ecología, identidad y raíces de la cultura puertopadrense, que incluyó las zonas de Chaparra y Delicias como centros económicos de importancia económica y social desde inicios del siglo XX.

Ha sido esta una de las jornadas científicas más provechosas y significativas en los últimos años en el territorio, capaz de enfocar miradas en pro del desarrollo y la identidad.

Defensores de la teoría Portus Patris  Antecedentes

Hasta las primeras tres décadas del siglo XX solo se conocía que la llegada del almirante Cristobal Colón a Cuba se había producido por algún lugar de la costa norte de la región oriental. Hacia finales de 1936 la Sociedad Colombista Panamericana, el Lyceum de La Habana y el Diario de la Marina convocaron un concurso para determinar el punto exacto de la arribada del genovés.

Al evento fueron enviados varios trabajos que defendían diversos puntos. Entre ellos Baracoa, Gibara, Puerto Padre y Manatí. Un año más tarde, luego de numerosos aplazamientos, la decisión del jurado fue pobre y ambigua.

Fernando García Grave de Peralta, el primero que defendió la hipótesis dejó escrito:

Se declaraba que hasta tanto aparecieran documentos y pruebas más convincentes no se determinaría el primer lugar visitado por Colón en la costa norte de oriente y recomendaba la publicación del trabajo de José M. Van der Gucht y Saturnino M. Parajón por haberse presentado con mejor fondo y forma.

Este trabajo que defendía la región de Bariay se publicó sin la aclaración del jurado. Fernando mantuvo que Puerto Padre había sido despojado de su derecho y en su criterio su investigación había lastimado la sensibilidad católica por expresar que con este acontecimiento «se iniciaba en nombre de la cruz y el Cristo, la esclavitud primero y la destrucción después de los felices moradores de Las Antillas».

Otro trabajo de Francisco Ramón del Pueyo fue presentado en defensa de Puerto Padre, como puerto primado titulado La Ruta del Almirante, que llegó fuera de plazo de admisión y no fue considerado.

Otros defensores de la teoría lo fueron el navegante norteamericano J.V. Fox encargado de la National Geografic, el alemán Rudolf Cronau, Silverio Jorrín, el abogado tunero Luís Galano, Mario López Aguilar, Serafín Alvero, Mary Ruíz de Zárate y el matrimonio norteamericano Judge y Marden. En la década de los ochenta del siglo pasado un equipo dirigido por Arnaldo Rueda Quintana publicaron el libro Portus Patris (1492 - 1992) y actualmente lo hace Reymundo Betarcourt Alvero.

(Tomado de la investigación: Defensa de la teoría de Portus Patris del historiador Ernesto Carralero Bosch.)

Artículos relacionados del autor:

Ramón Garrido: Memoria viva

El Salvador de Juana, por Reymundo Betancourt Alvero pdf

Puerto Padre tiene cosas que nunca tuvo Bariay





0 comentarios:

Publicar un comentario